El autor se propone, en este artículo, explicar, con base en el Nuevo Testamento, lo que es el kerigma para el mundo de hoy. Establece, primero, la relación entre kerigma y catequesis para, luego, profundizar en la identidad del kerigma en tres elementos básicos: la buena nueva de Jesucristo, la proclamación del mensaje y la interpelación del oyente a la conversión. Además, presenta el contenido del kerigma que se puede sintetizar en el misterio pascual y en el llamado a la conversión; identifica el método de la predicación kerigmática que no es otro que la inculturación, animada por la fuerza de la sabiduría de la Cruz; establece la relación entre los textos bíblicos y los acontecimientos salvíficos, lo mismo que entre kerigma, tradición, teología y exégesis; y termina colocando la nota característica del kerigma en América Latina y el Caribe: la opción por los pobres.
