El artículo se propone una lectura liberadora de la memoria colectiva de las curaciones de Jesús y efectos en la vida de las mujeres cristianas de entonces y de ahora. Las historias de curación que conservan las huellas de los distintos procesos de representación colectiva, no puede obviar la construcción cultural de género en ellas; la autora trata de de-construir los prejuicios y estereotipos androcéntricos, para abrir paso a una interpretación que no sea excluyente ni opresora.