El desarrollo humano: un paradigma centrado en la gente Muchos países como Singapur, que ahora son ricos, solo tienen gente, son pequeños, no son ni siquiera autosuficientes en agua, mucho menos en alimentos, minerales y combustible (Enríquez Cabot, 2004). Esta constatación respalda el planteamiento del primer Informe sobre Desarrollo Humano que sostiene que la verdadera riqueza de una nación está en su gente (PNUD, 1990). También ofrece, a otros países pequeños, densamente poblados y con poca disponibilidad de recursos naturales, como El Salvador, la posibilidad de construir una visión optimista sobre su futuro.