Días antes de la Navidad de 2008, televisores y periódicos dieron una noticia sorprendente y asustadora. El papa Benedicto XVI, en un discurso de la Curia romana, dijo, "salvar a la humanidad del comportamiento homosexual y transexual es tan importante como salvar la selva de la deforestación". Podemos imaginar la indagación y el repudio causado en la opinión publica…