Este artículo indaga en la razón de la disposición positiva que Pablo, al parecer, mostró con respecto a su debilidad y los sufrimientos que implicaba. No se jacta de sus debilidades, sino que incluso se delecta en ellas. Hace incluso una declaración paradójica: "Cunado soy débil, entonces soy fuerte". Sostenemos que la clave para comprender la relación paradójica entre poder y debilidad en la afirmación existencial de Pablo, así como su resiliencia frente a los numerosos sufrimientos que tuvo que soportar, se encuentra en la convicción de la gracia dinámica de Cristo...