El año 1979, y después de un largo parón a causa de la guerra y la dictadura, se recuperan las colonias de la Institución Libre de Enseñanza. Llevar un diario, cartearse con la familia y estar en contacto constante con la naturaleza continúan siendo las actividades centrales de esta experiencia que conserva el estilo, los valores, los aprendizajes y los buenos hábitos que Giner imprime a su obra educativa.