Una red de 26 centros catalanes impulsa la innovación a través del proyecto Escola Nova 21, cuyo eje vertebrador es el propósito de educar para la vida. La escola Congrés-Indians, en Barcelona, es uno de estos centros. Basada en los principios de la escuela activa, convierte la institución escolar en una experiencia de vida, en la que los alumnos exploran y experimentan a través de los ambientes de aprendizaje, marcan los ritmos de su propio conocimiento, toman decisiones en las asambleas, se relacionan con la naturaleza y el entorno y hablan de sus emociones.