Con perplejidad, preocupación e incluso indignación. Así viven las familias la sucesión de cambios normativos del sistema educativo en España. Diferencias sustanciales entre comunidades autónomas, recortes, eliminación de becas y costes anuales obligados causan desigualdad. El mandato constitucional que habla del derecho a la educación para todos queda en papel mojado.